Charly Deretti y Bibiana Steinhaus-Webb vuelven a encontrarse 18 años después de su primer partido
La pareja de árbitras forma parte del "Team One" de la FIFA en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA Marruecos 2025™ en curso
Ambas exjugadoras hicieron la transición de futbolistas a árbitras
Brasil y la RP China se enfrentaron en los octavos de final de la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA Marruecos 2025™. La espectacular Seleção se impuso con autoridad por 3-0, una victoria que despertó un sinfín de recuerdos en Charly Deretti, una de las 54 árbitras que participan en la gran cita mundialista.
La exjugadora brasileña convertida en árbitra habrá seguido con especial atención lo ocurrido en el campo 3 de la Academia de Fútbol Mohammed VI, ya que una de sus internacionalidades fue precisamente en un enfrentamiento contra la RP China. Aquel encuentro, disputado en Tailandia, tuvo lugar hace 18 años y, a diferencia de este duelo de octavos de final, no fue en un escenario mundialista.
"Desde que di mis primeros pasos en el fútbol de niña, siempre soñé con jugar un Mundial. Es un sueño que he perseguido hasta ahora y, al arbitrar en el Mundial Femenino Sub-17 de Marruecos, se ha hecho realidad", declaró una radiante Deretti.
Nacida en 1987 en la ciudad de Jaraguá do Sul, en el sur de Brasil, Deretti dio sus primeros pasos en el fútbol con apenas 11 años, antes de compaginar durante años sus compromisos futbolísticos con el futsal. Sus actuaciones en el campo le valieron la convocatoria para representar a la selección universitaria de Brasil, hasta que, a los 25 años, su pasión por el arbitraje eclipsó por completo sus otras actividades.
"Veía a los árbitros dirigir partidos de fútbol 11 y me decía: 'Yo podría hacer eso'. Cuando decidí colgar las botas, la transición al arbitraje fue el paso lógico. Tenía ganas de estar ahí, en el campo, seguir vinculada al fútbol de alguna manera y vivir el deporte desde otra perspectiva", añadió Deretti.
Ser jugadora es un privilegio y una bendición de Dios. Cuando una jugadora decide convertirse en árbitra, adquiere una perspectiva completamente nueva del juego.
Tras colgar las botas y tomar el silbato, la colegiada brasileña demostró de nuevo su capacidad para combinar talento y esfuerzo, ascendiendo gradualmente hasta la élite. Una serie de sólidas actuaciones en diversas competiciones nacionales de su país le abrieron las puertas para participar en la cita mundialista Sub-17 de Marruecos, donde hasta ahora ha dirigido tres partidos y se ha reencontrado con la jefa del Departamento de Arbitraje Femenino de la FIFA, Bibiana Steinhaus-Webb, quien ha desempeñado un papel influyente en su carrera.
Y es que, caprichos del destino, la alemana, otra exjugadora que pasó al arbitraje, fue la encargada de dirigir el partido que enfrentó a Deretti y sus compañeras contra la RP China en 2007.
"Parece que nos conocimos hace una eternidad. Todo ha cambiado mucho desde entonces", afirmó Steinhaus-Webb. "El fútbol femenino ha crecido enormemente, no ha parado de fortalecerse. Y aquí estamos, unos años después —en realidad, casi dos décadas—, y la tecnología es quizás lo que ha tenido el mayor impacto en el juego desde la perspectiva arbitral. El apoyo que recibimos hoy de la tecnología para tomar la decisión correcta en el campo es fantástico, y ojalá lo hubiera tenido yo hace años".
Al igual que Steinhaus-Webb, Deretti forma parte de un selecto grupo de árbitras que pueden contar con la experiencia de haber jugado, y la comprensión adquirida durante sus días de jugadora le da una ventaja significativa al dirigir partidos de alta tensión. "Una exjugadora aporta un conocimiento futbolístico inmenso. Conocen el juego a la perfección: cómo se desarrolla un partido y cómo se posicionan los equipos, lo que les da una ventaja enorme", declaró Steinhaus-Webb.
Sin embargo, "pasar de la perspectiva de jugadora a la de árbitra presenta un desafío", advirtió la pionera jefa del Departamento de Arbitraje Femenino de la FIFA, que fue la primera mujer en arbitrar en las categorías profesionales del fútbol masculino alemán. "Encontrar el mejor espacio para recibir el balón o marcar como jugadora es algo completamente distinto a situarse en la mejor posición para tomar la decisión correcta como árbitra".
En cuanto a los retos a los que se enfrentan las árbitras, Deretti no tardó en destacar el aspecto mental. "Como árbitra, cuando tienes un mal partido, es totalmente diferente a cuando te pasa como jugadora. Una jugadora siempre tiene otra oportunidad en el siguiente partido, pero no siempre es el caso de una árbitra. Cada vez que salgo, me digo que tengo que rendir y hacer un buen trabajo. El mayor reto es asegurarme de estar siempre preparada, porque nunca sabes cuándo será tu próximo partido".
Estoy segura de que, en algún momento de su carrera, todas las y los jugadores han discutido alguna decisión arbitral. Si crees que puedes hacerlo mejor, ¡demuéstralo! Únete a la familia arbitral, únete a nuestra comunidad.
A pesar de la presión que conlleva el arbitraje, la pasión de ambas por el fútbol sigue intacta. Ambas esperan con ilusión la fase de semifinales de esta gran fiesta Sub-17, con dos duelos apasionantes que se jugarán este miércoles. En la penúltima ronda, Países Bajos se enfrentará a México, mientras que las vigentes campeonas, la RDP de Corea, lucharán contra Brasil por un puesto en la final.
"Ser jugadora es un privilegio y una bendición de Dios. Cuando una jugadora decide convertirse en árbitra, adquiere una perspectiva completamente nueva del juego", concluyó Deretti. "Disfrutan del deporte tanto como antes, pero de una manera diferente".
¿Y quién sabe? Quizás entre las 504 jóvenes estrellas que participan este año en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA haya una o dos futuras árbitras destinadas a seguir los pasos de Deretti y Steinhaus-Webb.